Esa rara sensación de cada día
Cada día el mismo recorrido: Salgo de mi casa. Camino hasta la esquina. Espero. Viene la micro. Estiro el dedo. Se detiene y de un brinco me apodero de la pisadera. Avanzo al fondo del pasillo. A la pasada siento el calor virginal de las escolares que al igual que yo esperan que algo extraordinario les pase. Pero nada. Cada día es igual al anterior, excepto porque hay días que sí y que no. Hoy fue no. Tal vez mañana tenga la suerte de la semana pasada y logre meter la mano al bolso de alguna vieja de esas que el trabajo las tiene chatas, de esas que al igual que mi madre salen a la calle esperando que la suerte les cambie. Que reclaman porque no alcanza la plata y pueda sacarles el celular o el monedero y entonces me baje con esa sensación de alegría y tristeza. De pensar que un día llegaré a la casa y mi madre estará llorando porque un desgraciado le robó la plata de toda la semana.
3 Comments:
Un poco duro pero muy real.
Felicitaciones, yo tambien hice mi blog con la esperanza (ultrasecreta) de que alguien me leyera.
Te
do
Un poco duro pero muy real.
Felicitaciones, yo tambien hice mi blog con la esperanza (ultrasecreta) de que alguien me leyera.
Te quedo lindo. Beso
Publicar un comentario
<< Home